Autor
EUGENIO GRANELL
Pintores Históricos
EUGENIO GRANELL
Fernández Granell, Eugenio
( A Coruña, 28 de noviembre de 1912 - Madrid, 24 de octubre de 2001 )
Biografía
Granell estudia bachillerato y música en Santiago de Compostela. Becado por la Diputación de A Coruña viaja a Madrid en 1928 para estudiar violín en la Escuela Superior de Música. En 1930 ingresa en la Oposición de Izquierda, se afilia al POUM en 1935. Participa en diferentes tertulias y descubre el surrealismo a través de la revista Minotaure. En la Guerra Civil dirige el periódico El Combatiente Rojo. Inicia el exilio en Francia donde conoce a su compañera Amparo Segarra, con la que se traslada a República Dominicana. De esta etapa conservamos un cuaderno autobiográfico (1938-1940) donde asoman elementos surrealistas y la influencia de Picasso.
En 1941 entrevista a Breton para el periódico La Nación. A mediados de los cuarenta expone en República Dominicana, Guatemala y Puerto Rico.
Tras establecerse en Guatemala trabaja como profesor en la Escuela de Artes Plásticas. En 1947 participa en la muestra Le Surrealisme en París, promovida por Breton y Duchamp. Se traslada a Puerto Rico donde ocupa la cátedra de Historia del Arte en la Facultad de Humanidades. En 1950 participa en el Almanach Surréaliste du Demi-Siècle, dirigido por Breton. Crea El Mirador Azul y en 1951 publica Isla cofre mítico. Conoce a Duchamp en un viaje a Nueva York.
La geografía determina su estilo con un lenguaje de referencia a elementos del Caribe. El universo vegetal y animal se metamorfosean. Destacan temas como Cabezas de indios (1944-1946), Encuentros (1946-1948), Los Trópicos (1947–1952) o Metamorfosis vegetales (1952-1955).
A finales de los cincuenta se instala en Nueva York, ocupando una cátedra de literatura española en el Brooklyn Collage.
De esta etapa son las obras Piano de 1956 y La presencia del otoño en América del Sur de 1957. Momento de transición a los paisajes mágicos y la abstracción. La imagen surge de pinceladas en forma de escamas, como en Torero con figuras o Toro y Torero de 1960.
En 1969 viaja a España e inicia una vuelta a la figuración (1968-1972). Entre 1972-1976 surgen las Figuras Barrocas, horror vacui, referencias al cómic y la ilustración. Establece diálogos entre los personajes como en Contrabandistas pasando la frontera de 1973, La inauguración del volcán o Encuentro del Marqués de Santillana con la Serranilla, ambos de 1976.
En dibujo surgen seres aislados o pequeños grupos e individualiza la figura a través del color como en Arlequín de 1972. Entre 1977 y 1989 se aprecia un aplanamiento en obras como El rincón de los silencios de 1983 y Días de nubes o Gallos, ambos de 1985.
Retorna a España en 1985. Entre 1988-1999 produce su etapa de mayor automatismo e indefinición de la figura. Destaca la simplicidad del trazado como vemos en Fiesta para el caballo que regresa o Florero medieval, entre otras.